Friedrich Wilhelm Nietzsche fue un muy controversial filósofo, pensador, poeta, músico y filólogo alemán. Nació en Prusia en 1844 y falleció en Alemania en 1900. Debido a sus ideas contrarias a la filosofía tradicional, muchos lo consideraron un antifilósofo. Tenía un temperamento fuerte, y su carácter sólo empeoró con las jaquecas que sufrió a lo largo de toda su vida. Los traumas de su vida y sus conflictos internos hicieron que se volviera loco. Incluso firmaba sus documentos como Dionisos o El Crucificado, mostrando que en realidad creía que era una especie de dios.
Su madre quería que fuera pastor, pero él decidió abandonar la teología y dedicarse a la filología, que según la Real Academia Española es una "ciencia que estudia una cultura tal como se manifiesta en su lengua y en su literatura, principalmente a través de los textos escritos" (http://dle.rae.es/?id=Hvlsfm3). Dejó definitivamente el Cristianismo a los 20 años, cuando contrajo sífilis. Tiempo después, una caída de un caballo le provocó la parálisis de una de sus piernas. Estas dos condiciones físicas, junto con sus jaquecas, contribuyeron a su locura.
En cuanto al pensamiento filosófico, Nietzsche se rehusó a sistematizarlo o mecanizarlo. Prefirió un enfoque más lúdico y vitalista a través de la Literatura. Otra forma en la que se separó de la filosofía académica fue a través del uso de contradicciones y paradojas. Siguiendo el pensamiento de Schopenhauer, creía que el Cosmos era espontáneo y caótico, y que ruidosamente se hacía paso, sin seguir planes ya diseñados.
Estaba en contra del Cristianismo y sus supuestas ética y moral, que únicamente esclavizaban a los hombres. Por ello afirmaba que dios estaba muerto y que, a su muerte, el hombre se convertía en una especie de dios: el Superhombre. Esto se debe a que la muerte de dios es la única forma en que el hombre puede recuperar la alegría y serenidad de los griegos antiguos. De esta forma también se puede vivir de una manera nihilista, es decir, dejando al lado cualquier forma de determinismo; se puede omitir la historia y ver el futuro sin ilusiones.
Algunos de los temas que tocó, además del Superhombre, fueron el eterno retorno, la fidelidad a la Tierra, la inversión de valores, y la voluntad de poder. Estos no se tomaron como ideas políticas, pero fueron de inspiración para Hitler y su partido Nazi.
Imagen tomada de: https://www.taringa.net/posts/ciencia-educacion/18628679/El-eterno-retorno.html
El eterno retorno se refiere al intenso deseo de repetir eternamente un instante, por el profundo amor a la vida. Por ello, la vida, con sus altos y bajos, se repite una y otra vez infinitamente. A pesar de repetirse muchísimas veces, el eterno retorno establece que cada instante es único y debe vivirse intensamente. Nietzsche también creía que el tiempo es un círculo y que es eterno.
Imagen tomada de: http://www.dialogoexistencial.com/nietzsche-humano-demasiado-humano-%C2%A758-1878/
Este concepto se relaciona con el eterno retorno, ya que también se basa en un intenso amor a esta vida. Al ser una vida única, aunque se repita indefinidamente, esta fidelidad nos hace vivirla intensamente. El hecho de amar incondicionalmente esta Tierra hace que la idea de un mundo inmaterial mejor después de la vida sea absurdo. Este es uno de los puntos en que Nietzsche contradijo al Cristianismo, que cree en la vida eterna.
Imagen tomada de: http://pensar-deleuze.blogspot.com/2014/03/nietzsche-entre-deleuze.html
Según Nietzsche, la moral cristiana es únicamente una limitante que esclaviza a los humanos. Por lo tanto, sus valores son los del esclavo y consisten en una voluntad de igualdad; un resentimiento contra la vida superior; la censura de la excepción; la glorificación de los pobres, enfermos y débiles; la hermandad entre los hombres; y el amor y temor de Dios.
En cambio, él sugiere que estos valores sean invertidos o cambiados para que el hombre regrese a la moral aristocrática de los griegos, dejando a un lado el Cristianismo. Así, los nuevos valores serían la voluntad o deseo de una jerarquía; el amor a lo noble y poderoso; la necesidad de hacer la diferencia y romper con lo establecido; la falta de temor al dolor y al sufrimiento, característico de los héroes y guerreros; y la aceptación de la muerte de dios.
Imagen tomada de: https://senderosdefilosofia.wordpress.com/2015/04/17/la-voluntad-de-poder-como-herramienta-de-critica-moral-la-defensa-nietzscheana-del-hombre-autonomo-i/
En este concepto se ve la influencia de Charles Darwin en Friedrich Nietzsche, ya que él creía en la Selección Natural. La Voluntad de Poder se refiere a una ley del más fuerte, donde el hombre, siguiendo sus instintos más primitivos, usa su fuerza y agresividad para alcanzar el poder. Esta voluntad está en los hombres que no desean ser dominados, sino dominar.
Imagen tomada de: http://silvanaderobles.blogspot.com/2016/07/perspectivas-filosofico-pedagogicas-i-y.html
Finalmente tenemos uno de los pensamientos filosóficos más conocidos de Nietzsche: el Superhombre. Al no ser un ser estático, el hombre debe evolucionar. Por ello, este filólogo estudió al humano en varias etapas:
También puedes encontrar a este peculiar filósofo en la sección Existencialismo de Autores y Artistas Reconocidos.
Fuentes: